Tenía organizados mis feeds en carpetas de temas, pero no las leía todas: la conexión me hubiera reventado. Entonces, decidí poner un poco de orden y, para agilitar la tarea de actualización, borrar todas las carpetas de feeds que no leo (hasta que tenga banda ancha) y quedarme con una sola, moviendo a ella los blogs que, por despiste, se me quedaron por ahí pero quiero seguir.
Y entonces, el FeedDemon entro en caos e hizo honor a la segunda parte de su nombre.
Un simple error (ha marcado todos los posts no leídos como leídos) me ha tenido arriba y abajo, indignado porque algunos feeds no se habían actualizado. Vamos, el equivalente de escogorciarse por reconfigurar o reinstalar la impresora cuando tan sólo es que está desenchufada.
Esta tontería me ha llevado a malgastar unas dos horas que podía haber empleado en mejores actividades, pero como todo error, me ha hecho aprender algo del programa.
Cuantas veces un error tonto que no logramos identificar a tiempo nos lleva a malgastar tiempo y esfuerzos de mala manera. Lo peor es que, por mucho que nos esforcemos, esos errores forman parte de la ley de Murphy y se hacen indetectables hasta que alguna reorganización del universo los vuelve visibles. El clásico de estos fallos es el del cable desenchufado, pero hay otros muchos, especialmente al trabajar con computadoras. No importa la experiencia que tengas, que cada cierto tiempo te sucederá algo así, te frustrarás y te sentirás imbécil cuando descubras de que se trata.
Pero esto que parece anecdótico, en más de una ocasión lleva a consecuencias catastróficas. En el caso mencionado, apenas se trata de una incomodidad fácil de resolver, pero en otras situaciones un error minúsculo puede ser el desencadenante de la tópica bola de nieve que va creciendo hasta alcanzar un tamaño capaz de arrasar pueblos enteros (o aplastar al dibujo animado de turno).
Ante un error inesperado, después de intentar todas las soluciones conocidas, lo mejor es detenerse un rato antes de volver a intentarlo. Estoy seguro de que, alejándonos de ello, podremos volver sobre él con la cabeza más fresca y despejada y la solución (el cablecito desenchufado) aparecerá ante nuestros ojos casi inmediatamente.
Pero eso no quita que el FeedDemon siga teniendo fallos. Según él, no he actualizado este blog en dos días. ¿Será culpa de FeedBurner o simplemente soñé que sí lo hacía?
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