Una de las diferencias culturales que me llamó la atención cuando vine a Ecuador fue que el día de San Valentín no sea solamente el día del amor, sino también el de la amistad. Además, en otras partes de latinoamérica también es así (no sé si en todas). En mi pueblo, sólo se aplica a lo primero, mas no a lo segundo.
Ahora bien: ¿a qué es debido esto? Propongo tres hipótesis:
- Vender más. Con los enamorados, sólo vendes florecitas y cursiladas. Si le añades a los amigos, el mercado se amplía y la fecha se convierte en un bonus track de la navidad.
- Influencia de los curas. "Día del amor" se puede convertir con mucha facilidad en el "día de hacer el amor". Al añadirle lo de la amistad, como que la cosa pierde fuerza, al menos de cara al público, que es lo que importa. De todas formas, no parece que sirva de mucho: en estas fechas, los moteles (que aquí son algo así como habitaciones por horas para ya sabéis qué) revientan la caja.
- El niño feo y borde, que ni con canicas, ni con caramelos, ni con sobornos conseguía amigos, se lo sacó de la manga para, al menos, poder ahorrar un poco una vez al año. Los que ligan poco se lo agradecieron: al menos no tienen razones para deprimirse... tanto.
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