Exponer

Como en lo que se refiere a escribir, en muchas cosas considero que es mejor arrancar sin pensárselo mucho. Pero, en algún momento te tocará organizar un poco las cosas para caminar por mejores caminos o, al menos, evitar la mayoría de las piedras con las que te puedas encontrar.
Esto viene al caso porque hoy me he dado cuenta de que mi proyecto Autodidacta no puedo explicarlo con la claridad debida. En una reunión de la Asociación de Software Libre de Ecuador, he tenido que explicar en qué consiste, y mi exposición ha sido sustentada pero desorganizada. A pesar de que estábamos usando un infocus para proyectar la imagen de mi web, en la cual queda muy claro de que se trata (contenido en cómic sobre informática), y que he explicado algunos puntos del por qué el cómic es el mejor método de aprendizaje, me he quedado con esa sensación de vacío que te invade cuando, por ejemplo, no tienes una clase preparada y te toca improvisar. Y a pesar de que esto ha sido una improvisación en toda regla, me doy cuenta que he de estar preparado para este tipo de eventualidades. ¿Y si de pronto aparece un inversor que me dice "Te pago pero explícamelo línea por línea"? Estaría más que perdido. Y no porque no pudiese hacerlo, sino porque mi exposición estaría tan liada, saltando de la mitad al principio, yendo luego al final y luego retomando hilos que hayan quedado colgados, que seguramente terminaría perdiendo la oportunidad que se me brindase.
Es imposible cubrir todos los aspectos que pueden surgir a la hora de exponer una idea o un proyecto, pero me doy cuenta de que es indispensable partir de un discurso base para luego entrar a pormenorizar, respondiendo las dudas que vayan surgiendo. Por lo tanto, una asignatura pendiente que hay que repasar y "empollar" un tanto para que no vuelva a suceder lo mismo. No basta con que conozcas todos los entresijos de tu proyecto: has de saber exponerlos.
Siendo profesor, debería haber caído antes en este tema, pues quieras o no lo hago a diario. Pero, curiosamente, quizá por la diferencia de entorno, no se me había ocurrido hacer algo que hago muchas veces: transferir. Un despiste lo tiene cualquiera. En este aspecto, una vez aprendido, no volverá a ocurrir.